Y seguimos en racha...de premios

Querida peke del alma:

Mi querida Carmi, desde su precioso blog "Por los caminos azules", compañera de camino y de profesión, me ha enviado este premio, que para mí, más que premio, es un regalo. Porque cuando premian tu esfuerzo, premian un enorme valor, que debiera estar en alza, y cotizarse muy alto. Por eso le estoy tan agradecida y me siento tan orgullosa.

Sin esfuerzo no existen metas en nuestra vida. Y sin metas en nuestra vida, el sentido de la misma carece de sentido (valga la redundancia).

Desde el sencillo esfuerzo de "levantarnos" cada mañana cuando suena el despertador para enfrentarnos a un nuevo día, hasta el esfuerzo que realizamos para poner nuestro granito de arena en un mundo mejor, y por supuesto pasando, por el esfuerzo que supone recorrer este camino, esa palabra está presente en nuestras vidas, como un tatuaje del corazón, algo que siempre debe estar ahí, algo a lo que no debemos renunciar, algo que debe guiar nuestros pasos.

Por tanto, Carmi, muchísimas gracias, porque no sabes cuanto valoro este premio, y con que ahínco trabajo cada día en el cole para que mis enanos comprendan desde sus complejas cabecitas, que el esfuerzo les hará ser mejores personas. Y lo orgullosa que yo me siento cuando ese peke que se ha pasado días llorando diciendo "no puedo, no se, ayúdame" un día después de escucharme miles de veces el "tú puedes, venga, inténtalo, ya verás como te va a salir..", viene con la carita iluminada, satisfecho porque ha conseguido, con su esfuerzo, lo que él creía imposible.

Las reglas son las siguientes:

1. Guardar el premio con el enlace a quien te lo concedió.

2. Publicar estas reglas.

3. Compartir seis cosas o valores importantes y seis que no lo son.

4. Elegir a seis personas más.

Como el 1 y el 2 ya lo tenemos, vamos al 3

VALORES IMPORTANTES: Esfuerzo, Respeto, Honestidad, Generosidad, Perseverancia y Amor.

LO QUE NO ME GUSTA: Injusticia, Envidia, Mentira, Racismo, Crueldad, Egoísmo.

Y en cuanto a elegir a 6 personas más, esto cada vez se me hace más difícil, ya sabéis que prefiero daros el premio a todos los que pasáis por aquí. Pero hoy voy a cambiar un poquito la regla número 4, en ningún sitio he visto que este premio tenga que ser otorgado a alguien que tenga blog, así que aprovecho para darlo a otras personas que siempre están en mi corazón, aunque todos los que pasáis por aquí, ya hacéis un gran esfuerzo al aguantar la "historia de mi vida" y os lo merecéis.

A mis padres. Porque si alguien me ha enseñado el sentido de la palabra esfuerzo y lo han inculcado en mi vida, han sido ellos con su ejemplo día a dia, en tiempos difíciles y en circunstancias que nda tienen que ver con las mías. Ellos se lo merecen más que nadie. Os quiero.

A mis alumnos: Porque cada día me demuestran con sus 3 añitos, que si quieres puedes, se superan a sí mismos, superan retos mas grandes que su tamaño, y tienen el don del perdón, de la solidaridad, del cariño, del respeto y de la tolereancia, y si se equivocan, saben dar el abrazo más grande del mundo para disculparse.

A mi equipo de Educación Infantil del colegio Miguel de Cervants de Lora del Río (Sevilla): Porque un día creímos que podríamos cambiar el mundo desde nuestras aulas y a pesar de las dificultades y de los tropiezos, 10 años después, aún lo creemos y seguimos luchando por ello. Mis "supernenas" son la caña.

A Pedro, mi Pedrito, tu papá: Porque me demuestra día a día lo afortunada que soy, porque se esfuerza por hacerme sonreir, por darme la seguridad que me falta cuando dudo, por decir las palabras adecuadas cuando más lo necesito, porque se esfuerza por hacerme feliz y porque se que lo hará con más profundidad aún cuando tu estés con nosotros. Porque se lo merece por ser, simplemente como es.

A China tu país: Un país que si algo maravilloso tiene, es que en sus familias imperan los valores que a veces vamos olvidando aquí al otro lado: la paciencia, la virtud, la sabiduría, la esperanza, la templanza, el valor, y porque lo han demostrado con creces en los duros momentos que están viviendo.

Y a tí, mi niña querida, mi peke del alma: Porque para llegar a mis brazos, habrás recorrido en tu corta vida un largo camino de esfuerzo, por sobrevivir, por ser más fuerte, por resistir un trago duro en tu corta existencia, y porque me demostrarás con tu mirada, con tus ojitos, con tu carita de luna un día, que el esfuerzo que supone el camino que papá y yo estamos recorriendo, merece la pena porque la recompensa es de un valor incalculable.

Y nada más, que os quiero, que te queremos peke, con toda el alma. Besitos de algodón de mamá.