A todas las madres que esperan....

Querida peke del alma:

Ayer nos dimos un nuevo batacazo, como tantos otros, a veces ya no se que más puede pasar en este proceso de encontrarte... En China ha sucedido de todo, desde terremotos, a gripes, pasando por las Olimpiadas y no sé cuantas historias más que han ido poniendo un punto y seguido más en nuestra larga espera...

Ahora llega la gripe porcina. Y China decide cerrar cautelarmente y no dar asignaciones este mes, como medida preventiva. Lo razono, y tras la pataleta, comienzo a entenderlo, pero claro, no deja de ser un tropezón más en el camino.

Y sin embargo, siento más que nunca que soy madre.

A pesar de que anoche mi cabeza daba vueltas a revoluciones desconocidas para mí, a pesar de que mi corazón latía a 1000 por hora, no se porqué, yo sentia que aunque las cosas no vayan bien, te siento muy cerca.

Ahora más que nunca se de que pasta estamos hechas las madres y los padres adoptivos. Pero hoy, concretamente, por ser el domingo el día de la madre, quiero dedicar este cachito del blog, este rinconcito de mi alma, a todas las madres que como yo, esperamos la llegada de ese milagro que sois los hijos del corazón.

No se cuanto desea una madre biológica a su hijo, porque no lo he podido sentir dentro de mí. Pase lo que pase, cuando ya sabe que está dentro, la historia tiene un final, una fecha que día arriba o día abajo, se cumple. Y por fin le ven la carita, y la historia de 3 empieza a ser una realidad.

Nosotras no tenemos ese cordón umbilical de células ni sangre, tenemos un cordón de hilo rojo, de esperanzas y de sueños que nos atan a nuestros hijos a través del tiempo y del espacio.

No nos abulta la barriga, pero si alguien pudiese ver las dimensiones de nuestro corazón, se asombraría de ver como un músculo tan pequeño, cede y estira tanto para albergar a alguien tan pequeñito y desconocido.

Vemos a nuestros hijos en el rostro de cada niña china que se encuentra en nuestro camino, y tímidas y con temor de invadir la intimidad de esa familia, las observamos, las miramos y en sus ojitos, reflejamos nuestra propia historia...

No tenemos las hormonas revueltas, pero si muchos altibajos, subimos y bajamos de una montaña rusa de emociones constantemente, con las noticias que llegan desde cualquier lado y que puedan afectar a este camino nuestro...

No solemos tener la habitación preparada, ni todo terminado, porque el factor sopresa de la edad hace que al final, todo sea una carrera, una carrera de fondo contra reloj, para que cuando lleguéis a casa, todo esté preparado...

Nos levantamos cada mañana con el pensamiento en vosotros, pequeños hijos tan lejanos, y nos acostamos viendo vuestra cara en la luna, en las estrellas...

Nuestra vida cambia desde el primer documento, porque ya os soñamos y os imaginamos correteando por la casa...

Ponemos nuestra alma, como un bolsillo, del revés, para que nos "estudien" y nos digan si somos o no aptos para ser padres, bajo el criterio de aquellos, que muchas veces no nos entienden...

Luchamos años y años, contra la burocracia, la administración y los factores incontrolables que rigen nuestro proceso.

Y aún así, seguimos adelante. Nos caemos y nos volvemos a levantar. Yo ya he hecho mio el proverbio chino que dice "si te caes 7 veces, levántate 8..." y llevo perdida la cuenta de las veces que nos hemos caido ya, peke del alma...

Vivimos en la incertidumbre, en el no saber, tenemos un máster en paciencia y un cum lauden en rumorología, aprendemos idiomas estudiando las páginas de adopción de otros paises, y nos familiarizamos con el lenguaje burocrático de tanto estudiar requisitos.

Somos malabaristas de la esperanza, y magos del tiempo. Somos poetas del corazón y artistas de la sonrisa. Miramos cada mañana por la ventana y deseamos dar una patada al calendario para estar más cerca de vosotros, aunque eso signifique perder años de nuestra vida en el aire...

Pero sobre todo somos enfermeras y arquitectas. Reconstruimos casi a diario nuestro corazón y lo llenamos de tiritas de "ya mejorará", "esto tiene que cambiar", y las mantenemos pegadas por el amor que os tenemos y por el apoyo de todos los que nos rodean. Y por más que se resquebraje este pobre corazón, siempre hay lugar para una tirita más...

Y si todo esto no es una inmensa prueba de amor, la más grande del mundo, que alguien me explique cual puede ser...


Querida peke del alma, yo hoy más que nunca, me siento tu madre. Porque a pesar de lo que pase, de lo que digan o de lo que ocurra, luchamos tanto, tanto por conseguir nuestro sueño, que creo que ya hemos demostrado con creces sin poderos sostener aún en los brazos, que somos MADRES, así con mayúsculas.

Querida peke del alma: el domingo 3 de Mayo es el día de la madre. Yo lo voy a celebrar este año en compañía de otras 3 madres maravillosas, Geli, Gina y Xelo. Madres del corazón. Madres en toda la extensión de la palabra...

Te quiero peke, de igual modo que ellas quieren a Estrella, a Laura o a Sara. Y donde quiera que estéis las cuatro, por favor, dadle un tirón fuerte al hilo que ya nos lo merecemos, ¿verdad?.

Mil besos para todas las mamás del corazón, porque dentro de ellas guardan el secreto del mundo, el amor más incondicional y la espera más dulce, por más larga que sea...

Con todo mi amor, MAMÁ.

Y como mucho de magia, rodea toda esta aventura, con todo mi cariño, os dejo esta canción a todas las mamis del corazón...(Os recomiendo parar primero en el pause el ipod de arriba de la música para que podáis escuchar la letra despacito...)

Y muy importante para mí y para tí, querida peke, hoy es el cumple de papá. 37 años de los que ya lleva muchos soñando contigo, con su carita de luna, con su pekeñeke como él dice. Serás la niña más afortunada del mundo porque tendrás el mejor padre del mundo. Felicidades Pedro, por todo lo que eres, por todo lo que vales y por todo lo que el futuro te tiene guardado de bueno...Te quiero.