Cariño mío, hoy hace 3 meses que nuestro expediente duerme en las oficinas del CCAA. Duerme y sueña como yo, contigo, hasta que unas manos, un día, lo despierten, para unirlo con lo más bonito del mundo, contigo, amor. Yo se que aún falta mucho, que las noticias no son positivas, que las cosas han empeorado mucho desde que comenzamos allá por ese 7 de noviembre de 2005.
Pero me da igual. Yo siempre he dicho que alcanzar una estrella no es algo que esté reservado a cualquiera. Es prácticamente imposible. Un sueño. Y tú eres mi estrella, y por tanto, debe ser difícil alcanzarte. La prueba es mi paciencia, nuestra paciencia, la mía y la de tu padre, que cada minuto te soñamos y no sabemos cuando llegará el momento de abrazarte. Sólo de decirlo se me eriza la piel. Sólo de pensarlo me emociono.
Y tú, carita de luna, redonda como la que brilla en el cielo y vela mis desvelos y mis sueños y los tuyos dondequiera que estés, se que nos estás esperando. No voy a pensar en lo que nos queda por delante, sino en los 3 meses que ya hemos dejado atrás. Se han pasado volando a pesar de los nervios. Y pasarán más, porque si algo es imposible, es de momento, detener el tiempo.
Que te queremos, lo sabes. Que te soñamos, también. Y hoy, día de los enamorados, nos separan 3 meses menos de tí.
Que el amor siempre guíe nuestros pasos, todos y cada uno de los días de nuestra vida.
Te estamos esperando, ven pronto amor.
Papá y mamá
