Querida peke del alma:
Ayer cumplí 36 años... ¡¡qué fuerte, como pasa el tiempo!!
Ahora, lo que sí se, es que, llevo toda una vida esperándote. Desde que era pequeñita pequeñita, y jugaba con mis muñecas, creo que quería ser madre. Supongo que mi vida y mi infancia fue tan feliz, que para mí, ese estado de felicidad era el que yo vivía en mi casa, en mi familia, y por tanto, lo que quería conseguir para el futuro.
Entre otras cosas, ese amor a vosotros, los niños, me llevó a elegir una profesión inmensamente maravillosa, aunque hoy dia no muy reconocida, pero me da igual, soy feliz cada mañana cuando veo a mis niños, y me siento muy orgullosa cuando reflejan cosas de mí, cuando me imitan, cuando por fin aprenden algo que les costaba un mundo, o simplemente, cuando me abrazan, porque al igual que yo los necesito y los quiero, se que ellos, también me quieren a mí... Hoy sin ir más lejos, en la estación, antes de venir, me he encontrado a uno de mis niños, Antonio, tan sólo hacia un par de horas que habíamos salido de clase, y nada más verme, allí, fuera del cole, se ha venido corriendo a mis brazos como si hubiese pasado una eternidad. Esos momentos, valen millones.
Y luego, un día, por fin, supimos que te esperábamos a tí, que no podía ser de otra forma ni de otro modo, que allí, en un rinconcito del mundo, nos estás esperando, y el día que ese momento por fin llegue, sabremos que la espera ha merecido la pena, seguro, sin duda alguna, aunque sea más tarde de lo que esperábamos, aunque estos 36 años que ayer cumplí yo los deseaba pasar a tu lado, y los he pasado con tu presencia en mi corazón, que es muy grande, pero con tu ausencia física, aunque me duela.
Se que probablemente deberé cumplir los 37 sin tenerte a mi lado, lo único que anhelo, que sueño que deseo, es que estés muy cerca de mi, a punto de que este sentimiento tan grande que guardo se haga realidad por fin en tus ojos, en tus manitas, en tu carita, en tí mi amor.
Con las asignaciones de cada mes, me alegro y crece la esperanza, con cada padre que hace realidad su sueño, yo vivo el mio un poquito más cerca. Ayer precisamente, de regalo de cumpleaños, llegaron las asignaciones de sete mes. Hasta el 4 de Enero de 2006, por fin este año, que es nuestro año, aparece como fecha y referente. Nos queda muchísimo aún, tal y como dice el posit de arriba, nos separan 314 días de asignaciones de tí. Mucho sí, pero menos que ayer.
La celebración de mi cumpleaños la hemos dejado para este próximo saábado con toda la familia ya que este hemos estado en Praga. De todas formas, te puedes imaginar, que aunque las velas las vaya a soplar el día 8, ayer, sabrás perfectamente donde estaban mis deseos, a qué lugar volaron, y en qué forma cobraron cuerpo en mis sueños. Sí, seguro que ya lo sabes.
Pues que sepas que sigues ardiendo, como esa vela que soplaré, dentro de mi corazón, más fuerte, más viva y más presente que nunca. Cumplir años es señal de que los has vivido, asi me lo enseñó mi madre, y por eso te digo con orgullo, que llevo 36 años esperándote.
Te quiero, te queremos, te esperamos... ven pronto cariño...
Mamá (con un año más) y papá...
Ayer cumplí 36 años... ¡¡qué fuerte, como pasa el tiempo!!
Ahora, lo que sí se, es que, llevo toda una vida esperándote. Desde que era pequeñita pequeñita, y jugaba con mis muñecas, creo que quería ser madre. Supongo que mi vida y mi infancia fue tan feliz, que para mí, ese estado de felicidad era el que yo vivía en mi casa, en mi familia, y por tanto, lo que quería conseguir para el futuro.
Entre otras cosas, ese amor a vosotros, los niños, me llevó a elegir una profesión inmensamente maravillosa, aunque hoy dia no muy reconocida, pero me da igual, soy feliz cada mañana cuando veo a mis niños, y me siento muy orgullosa cuando reflejan cosas de mí, cuando me imitan, cuando por fin aprenden algo que les costaba un mundo, o simplemente, cuando me abrazan, porque al igual que yo los necesito y los quiero, se que ellos, también me quieren a mí... Hoy sin ir más lejos, en la estación, antes de venir, me he encontrado a uno de mis niños, Antonio, tan sólo hacia un par de horas que habíamos salido de clase, y nada más verme, allí, fuera del cole, se ha venido corriendo a mis brazos como si hubiese pasado una eternidad. Esos momentos, valen millones.
Y luego, un día, por fin, supimos que te esperábamos a tí, que no podía ser de otra forma ni de otro modo, que allí, en un rinconcito del mundo, nos estás esperando, y el día que ese momento por fin llegue, sabremos que la espera ha merecido la pena, seguro, sin duda alguna, aunque sea más tarde de lo que esperábamos, aunque estos 36 años que ayer cumplí yo los deseaba pasar a tu lado, y los he pasado con tu presencia en mi corazón, que es muy grande, pero con tu ausencia física, aunque me duela.
Se que probablemente deberé cumplir los 37 sin tenerte a mi lado, lo único que anhelo, que sueño que deseo, es que estés muy cerca de mi, a punto de que este sentimiento tan grande que guardo se haga realidad por fin en tus ojos, en tus manitas, en tu carita, en tí mi amor.
Con las asignaciones de cada mes, me alegro y crece la esperanza, con cada padre que hace realidad su sueño, yo vivo el mio un poquito más cerca. Ayer precisamente, de regalo de cumpleaños, llegaron las asignaciones de sete mes. Hasta el 4 de Enero de 2006, por fin este año, que es nuestro año, aparece como fecha y referente. Nos queda muchísimo aún, tal y como dice el posit de arriba, nos separan 314 días de asignaciones de tí. Mucho sí, pero menos que ayer.
La celebración de mi cumpleaños la hemos dejado para este próximo saábado con toda la familia ya que este hemos estado en Praga. De todas formas, te puedes imaginar, que aunque las velas las vaya a soplar el día 8, ayer, sabrás perfectamente donde estaban mis deseos, a qué lugar volaron, y en qué forma cobraron cuerpo en mis sueños. Sí, seguro que ya lo sabes.
Pues que sepas que sigues ardiendo, como esa vela que soplaré, dentro de mi corazón, más fuerte, más viva y más presente que nunca. Cumplir años es señal de que los has vivido, asi me lo enseñó mi madre, y por eso te digo con orgullo, que llevo 36 años esperándote.
Te quiero, te queremos, te esperamos... ven pronto cariño...
Mamá (con un año más) y papá...
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